Los Rolling Stones no podían conseguirla. Hamlet tuvo que morir por ella. Henry David Thoreau vagó por los bosques para hallarla. Sinatra la encontró a su manera.
La satisfacción.
Nos encontramos más solos, más explotados y más estresados que nunca. De alguna manera, hemos olvidado lo que realmente importa. Si tan sólo pudiéramos hallar unos momentos más de satisfacción: salir temprano de la oficina para jugar al fútbol; perfeccionar el suflé; llamar por teléfono a un viejo amigo; escribir una nota de agradecimiento..
Antes de la electricidad, la satisfacción se hallaba en la intención, la tranquilidad, la risa, la alegía, el compañerismo, el desarrollo personal y la espiritualidad. Hemos progresado mucho, pero después de todo, puede que no hayamos cambiado tanto.
muy muy buen texto =)
ResponderEliminarEspero seguir leyéndote todos los días.
Un beso ^^